Vi detrás del espejo

Cada vez que alguien me pregunta cómo estoy, educadamente respondo que bien y pongo un poco más de tierra sobre lo que escondo con cada respuesta... estamos terminando este año horrible, en el que dejé de creer y cada día me convenzo más, que no volveré a confiar en la gente.
No podría vivir si no creyese que hay buena gente, eso ni siquiera me inquieta, mi decepción es que me siento encerrada en un cuarto oscuro, en el que no alcanzo a ver mis manos, y no hay siquiera ruidos, un cuarto lleno de nada y en donde se murió mi todo.
Mis pies siempre están frios y mis manos están inquietas, todo me asusta, ya no soy yo y eso me aterra no conozco mi nuevo yo y me cae mal. Es desconfiada y arisca, piensa todo y calcula todas las posibles consecuencias, ya no vive, sólo sobrevive... y sé que estoy profundamente mal.
En algún momento, esa angustia me cansará, no quiero acostumbrarme a ella, es ingrata y fria, es siniestra y egoísta.
Siento que necesito mucho, pero perdí mi deseo de encontrarlo...
Siento que no sirvió de nada, pues seré olvidada como cualquier otra que haya significado nada...